(84) Orlando Galindo - Cuando el Gran Arquitecto de transformó en...
Cuando el Gran Arquitecto de transformó en Mexicano, una Historia de Deísmo Masónico
Hace trillones y trillones de años, mucho antes del Big-Bang, antes que el Todo y que la Nada existieran, existía una única Mente Consciente, bueno si a esto se le puede definir como Mente, ya que nuestro lenguaje humano es incapaz de definir ese Aquello o ese Algo, que existió antes de Todo, que existe, y que seguirá existiendo cuando el Todo concluya. Bien, ese Algo diseñó lo que posteriormente sería la Creación y las Leyes que al Todo regirían. A ese algo o alguien los masones le llamamos el Gran Arquitecto del Universo, no es propiamente correcta esta definición de “Arquitecto” pero es la que más se aproxima. Así, que llegó el momento en que ese Alguien denominado Arquitecto del Universo, vendría a la Creación a revisar su diseño y obra. Y así verificar como andaban las cosas y que si era necesario hacer ajustes o no, o bien disolver la obra y comenzar otra más. Y como en estas historias extrañas, ese Gran Arquitecto Divino, eligió a nuestro Bello pero compulsivo planeta para tal propósito de revisión de la Creación. Así, que para tal efecto llegó a nuestro siglo XXI, y como era por el mismo ideado , ni que él mismo violara sus propias leyes establecidas hace trillones de años, leyes como la de no intervenir directamente sobre su creación, así desde un principio se estableció usar comisionados, y fue nació como humano; así nació como un bebe humano mexicano, pensó así pasaría desapercibido en una Nación tan extraña, y surrealista como México. México se dijo el Gran Arquitecto del Universo es justo el país del cual sacaré la muestra, para mi análisis de la creación toda, y de ahí concluiré lo conducente, se dijo a sí mismo. El Gran Arquitecto del Universo, nació moreno, no muy inteligente, no muy tonto, no muy rico, no muy pobre, no muy guapo, no muy feo, sí, sí como cualquier ciudadano promedio de este planeta. Y quedó con él mismo de olvidar que él era Dios, el Gran Arquitecto del Universo mismo, y que a su momento oportuno lo recordaría todo, pues para tal efecto de saberse que él era Dios, no sacaría las conclusiones objetivas que buscaba. Y como era necesario Dios , el Gran Arquitecto para tal efecto se privó a sí mismo de todos sus extraordinarios poderes. Así que fue, un Mexicanito más entre 130 millones, y le bautizaron con el nombre de Jacinto López, Jacinto López desde muy niño, sentía que debía recordar algo, pero por más que intentaba no lo recordaba, y así en su fuero interno, sentía no checaba nada de lo que le explicaban de religión, ni de ciencias en la universidad , ni de política ,ni de costumbres, nada le parecía encajaba con la realidad, todo estaba equivocado se decía a sí mismo. Pero dentro de Jacinto López todo registraba, y en su cerebro había instalada una potente antena que constantemente enviaba datos a la central ubicada en el mismo Dios de todos los Universos. Y así pasaron los años, y en el centro los datos eran confusos, había cosas buenas y cosas malas, esperanzas e infortunios, logros y derrotas, cosas justas e injustas, pero aún y todo las cosas marchaban cual debieran, según el ideal de ajustes divinos. Fue entonces que Dios, el Gran Arquitecto del Universo revisó los estatutos, leyes y normas que deberían regir el universo entero, y sé dio cuenta que así había sido establecido: una lucha entre el Caos y el Orden , una Lucha entre la Justicia y la Injusticia. Entonces el Mexicano Jacinto López, el emisario avatar del Gran Arquitecto del universo, gracias a que un día se inició francmasón, poco a poco despertó, y lo fue recordando todo, supo quién era y cuál era su misión, la masonería se dijo Jacinto habla con más apego a la verdad que las religiones y las ciencias humanas. Y así el francmasón Jacinto fue que en Logia dijo esto: Mis hermanos Francmasones y no masones todos, los que tenéis a bien atender mi notificado ahora, todos somos esa Gran Luz, todos somos Dios , todos somos el Gran Arquitecto del Universo, de eso me he dado cuenta de poco en poco, y de más me he dado cuenta, y es que las Leyes que Rigen el Universo, si bien el Supremo Dios no puede interferir directamente sobre su propia creación, por razones establecidas así desde un principio, sí que puede operar a través de nosotros sus representantes aquí en este Planeta, así que de poco hacemos mucho, en nuestras manos esta ordenar o destruir este planeta, somos una consciencia global, un solo Ente colectivo humano. Y si bien el Deísmo masónico nos lo explica, que Dios existe, y que se retiró hacia el Infinito, pero en su ausencia nos dejó un legado a nosotros los seres pensantes, dándonos la herramienta más preciada del Universo que es nuestra inteligencia. Pero, no es razón de alarma si este nuestro mundo colapsa, habrán otras oportunidades, así hasta que exista la consciencia plena y nos dé ese resultado ideado por Dios , el Gran Arquitecto del Universo de crear a la Sociedad perfecta en algún momento, esa Sociedad Perfecta a la que aspira nuestra Masonería. Es cuánto. – Alcoseri.(84) Orlando Galindo - Cuando el Gran Arquitecto de transformó en...
Hace trillones y trillones de años, mucho antes del Big-Bang, antes que el Todo y que la Nada existieran, existía una única Mente Consciente, bueno si a esto se le puede definir como Mente, ya que nuestro lenguaje humano es incapaz de definir ese Aquello o ese Algo, que existió antes de Todo, que existe, y que seguirá existiendo cuando el Todo concluya. Bien, ese Algo diseñó lo que posteriormente sería la Creación y las Leyes que al Todo regirían. A ese algo o alguien los masones le llamamos el Gran Arquitecto del Universo, no es propiamente correcta esta definición de “Arquitecto” pero es la que más se aproxima. Así, que llegó el momento en que ese Alguien denominado Arquitecto del Universo, vendría a la Creación a revisar su diseño y obra. Y así verificar como andaban las cosas y que si era necesario hacer ajustes o no, o bien disolver la obra y comenzar otra más. Y como en estas historias extrañas, ese Gran Arquitecto Divino, eligió a nuestro Bello pero compulsivo planeta para tal propósito de revisión de la Creación. Así, que para tal efecto llegó a nuestro siglo XXI, y como era por el mismo ideado , ni que él mismo violara sus propias leyes establecidas hace trillones de años, leyes como la de no intervenir directamente sobre su creación, así desde un principio se estableció usar comisionados, y fue nació como humano; así nació como un bebe humano mexicano, pensó así pasaría desapercibido en una Nación tan extraña, y surrealista como México. México se dijo el Gran Arquitecto del Universo es justo el país del cual sacaré la muestra, para mi análisis de la creación toda, y de ahí concluiré lo conducente, se dijo a sí mismo. El Gran Arquitecto del Universo, nació moreno, no muy inteligente, no muy tonto, no muy rico, no muy pobre, no muy guapo, no muy feo, sí, sí como cualquier ciudadano promedio de este planeta. Y quedó con él mismo de olvidar que él era Dios, el Gran Arquitecto del Universo mismo, y que a su momento oportuno lo recordaría todo, pues para tal efecto de saberse que él era Dios, no sacaría las conclusiones objetivas que buscaba. Y como era necesario Dios , el Gran Arquitecto para tal efecto se privó a sí mismo de todos sus extraordinarios poderes. Así que fue, un Mexicanito más entre 130 millones, y le bautizaron con el nombre de Jacinto López, Jacinto López desde muy niño, sentía que debía recordar algo, pero por más que intentaba no lo recordaba, y así en su fuero interno, sentía no checaba nada de lo que le explicaban de religión, ni de ciencias en la universidad , ni de política ,ni de costumbres, nada le parecía encajaba con la realidad, todo estaba equivocado se decía a sí mismo. Pero dentro de Jacinto López todo registraba, y en su cerebro había instalada una potente antena que constantemente enviaba datos a la central ubicada en el mismo Dios de todos los Universos. Y así pasaron los años, y en el centro los datos eran confusos, había cosas buenas y cosas malas, esperanzas e infortunios, logros y derrotas, cosas justas e injustas, pero aún y todo las cosas marchaban cual debieran, según el ideal de ajustes divinos. Fue entonces que Dios, el Gran Arquitecto del Universo revisó los estatutos, leyes y normas que deberían regir el universo entero, y sé dio cuenta que así había sido establecido: una lucha entre el Caos y el Orden , una Lucha entre la Justicia y la Injusticia. Entonces el Mexicano Jacinto López, el emisario avatar del Gran Arquitecto del universo, gracias a que un día se inició francmasón, poco a poco despertó, y lo fue recordando todo, supo quién era y cuál era su misión, la masonería se dijo Jacinto habla con más apego a la verdad que las religiones y las ciencias humanas. Y así el francmasón Jacinto fue que en Logia dijo esto: Mis hermanos Francmasones y no masones todos, los que tenéis a bien atender mi notificado ahora, todos somos esa Gran Luz, todos somos Dios , todos somos el Gran Arquitecto del Universo, de eso me he dado cuenta de poco en poco, y de más me he dado cuenta, y es que las Leyes que Rigen el Universo, si bien el Supremo Dios no puede interferir directamente sobre su propia creación, por razones establecidas así desde un principio, sí que puede operar a través de nosotros sus representantes aquí en este Planeta, así que de poco hacemos mucho, en nuestras manos esta ordenar o destruir este planeta, somos una consciencia global, un solo Ente colectivo humano. Y si bien el Deísmo masónico nos lo explica, que Dios existe, y que se retiró hacia el Infinito, pero en su ausencia nos dejó un legado a nosotros los seres pensantes, dándonos la herramienta más preciada del Universo que es nuestra inteligencia. Pero, no es razón de alarma si este nuestro mundo colapsa, habrán otras oportunidades, así hasta que exista la consciencia plena y nos dé ese resultado ideado por Dios , el Gran Arquitecto del Universo de crear a la Sociedad perfecta en algún momento, esa Sociedad Perfecta a la que aspira nuestra Masonería. Es cuánto. – Alcoseri.(84) Orlando Galindo - Cuando el Gran Arquitecto de transformó en...
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